CHEMA LÓPEZ Carta de Quebrados Galería Rosa Santos (València) 25/03 – 20/05
En el espacio de la galería Rosa Santos encontramos varias pinturas de gran formato en las que el artista representa los casos escogidos para contextualizar el proyecto, además de una serie de monocromos que referencian los fondos de los mismos documentos. El detalle y la destreza que se aprecia en las pinturas permite observar con claridad las posiciones que los certificados defienden a través de su particular uso del lenguaje y de los datos que en ellos se recogen. Por un lado, en la sala inferior, apreciamos algunas de las consignas bajo las cuales se definió el enfrentamiento entre carlistas y anarquistas en la guerra civil española, así como sus distintas maneras de justificar el uso de las armas – para unos era una cuestión divina, mientras que para otros se traducía en responsabilidad social. También en las pinturas se plantean cuestiones como el significado de ser Hutu o Tutsi en Ruanda bajo la dominación belga, o incluso la paradoja (e injusticia) que lleva a acreditar a un policía sicario en Guatemala para que espíe y arreste activistas indígenas locales. Por otro lado, los monocromos que vemos en la sala superior actúan como un símbolo de la autoridad ausente, esa que se esconde detrás del permiso emitido, dando protagonismo a las realidades antagonistas del conflicto mientras que desdibuja su propia responsabilidad. Ejemplo de ello podría ser el papel determinante del legado colonial belga sobre el genocidio de Ruanda, en el que se trató de exterminar a la población Tutsi; o cómo el poder Británico apoyó con su legitimación institucional la ocupación e injustificables acciones de Israel contra Palestina.
(Extracto del texto de la hoja de sala de Alba Folgado).